Individualidad.

Es mi yo, alma,
de mar sin calma,
 alejada de la ritma simétrica,
 la que nunca espera,
la que siempre entrega...
y adolezco, mortal pretexto,
 para el ser invisible
 increíble que pervive
 en lo mas profundo
iracundo sin paz,
 de mis interiores tormentos..
Hay segundos intemporales
robados al efebo inmortal
que nunca seremos
 simple motivación al que caduca
 creer que se posee alguna sustancia
de excéntrica importancia
 debajo de nuestra piel.
 Por el marcar a fuego
 nuestro breve paso, siempre de hielo---