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LAS MUSAS



Las Musas

No le agradaba demasiado pasar dos veces por el mismo lugar, el mismo día y retorcía cualquier pretexto frente al espejo; cada mañana; con un amanecer fabuloso o un Nefasto viernes Negro que le arrancara el oso Panda que tenía hibernando en el interior de su cerebro.
Levantarse, 
zapatillas, 
aseo matinal con deposiciones de más o de menos,(opssss)
café,
mas café, 
albornoz de tocar las teclas, 
gorro de franela, 
estufa y PC sincronizados al temblor del oso, 
lectura de emilios, 
lectura de la prensa, 
iniciar Scrivener,
 releer las ultimas líneas para asustar al oso,
esperar que el plantígrado se aleje un poco para que Las Musas "Osen" ocupar el trono que el Panda ha dejado vacío y encarrilar la mañana del 31 de Diciembre de 1906, por ejemplo....

La rutina se hace hueco con gran velocidad en la mente de cualquier escritor; igual que el cemento mezclado con yeso como argamasa con la que unir varios bloques de arcilla. Es compacto y duro en apariencia; como el mas duro hormigón, pero que puede acabar con nuestro proyecto convertido en un montón de piezas sin ninguna conexión entre sí. A nivel molecular, el yeso tiene tan poca cohesión que cualquier mezcla con derivados de piedra molida está considerada de utilidad cuando la aplicación es efímera.

Posdata del oso:

      Cualquier día de estos empiezo a cobrar alquiler aunque no se yo si haremos negocio teniendo en cuenta la calidad y los materiales empleados en sustentar todo el edificio.
 

El ego de los Dioses

En esencia somos consciencia.
hacemos leyes inexcusables
partiendo de nuestras,
propias,
debilidades,
banales,
porque el premio es seguro.
Creemos ser dioses
en cuerpos mortales.
obviando lo evidente
vemos crecer girasoles ciegos
apasionados, en nuestro ego
y sin tender las manos
seguimos rutilantes
Vía Láctea encumbrada
de leche pasteurizada.
Al otro lado te observan
gatos y latas de conserva
noches de broche y derroche
reproche
de medalla, en reserva.





Veo tu alma de negra

 

Cuando pienso en ti,
te veo azul como como el mar

atormentado,
blues de ojos desorbitados,
oda de sonido bronco,
erejia sin fin,
epílogo sin prólogo,
que ahora empieza
aqui, por ti.
El fin es un fin,
es el vasto y azul
plagado de estrellas
en suave tul de blues,
Y risas,
sin premisas, de esas alocadas,
premeditadas y ausente de prisas.......